On a vu Don Quichotte, l'homme à la tâche

Fue un espectáculo de danza que Le Parvis ofreció a su público de Tarbes las noches del miércoles y el jueves, en pleno Fest-nov, la semana dedicada a la danza. Un viaje dancístico donde dos emblemas de la cultura española, el flamenco y Don Quijote, se encuentran, se entrelazan y se fusionan. Stéphanie Fuster se vale de una sensible imaginería del personaje de Cervantes y de las figuras flamencas que encarna, utilizándolas como puntos de diálogo donde la ingenuidad de uno responde a la fragilidad del otro, donde la sensualidad se encuentra con la combatividad, donde cierto orgullo, incluso grandilocuencia, las une. Con esta delicada imaginería, Stéphanie Fuster construye un viaje en torno a este colorido personaje, un viaje que comienza frente a un gran lienzo plateado que pronto se transforma en un mapa de España. Unos pocos pasos de flamenco, un inconfundible arco ibérico en su espalda, las melodías andaluzas de las canciones de Alberto García, y nos embarcamos en una experiencia de poco más de una hora, salpicada de imágenes que ofrecen una visión conmovedora de Don Quijote y el flamenco. Juntos, tejen una historia donde la danza y la literatura se entrelazan, y donde se forja una cultura compartida en la encrucijada del flamenco y el carácter de Cervantes. Un momento tan delicioso como una torta de aceite sevillana.